Una disminución en la demanda de ciudadanos estadounidenses por adquirir viviendas en Tijuana producto de una menor diferenciación de precios se traducirá en una reestructura en los precios tanto de renta como venta de terrenos.
De acuerdo con Leonardo Topete Sánchez, vocal de Valuación de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) Tijuana, esto ya ha comenzado a notarse en la ocupación de verticales y en la reducción de los precios de renta.
Aunque esto se debía a que dicho mercado buscaba viviendas más económicas, aseveró que hoy por hoy ya no es tanta la diferencia en los precios de bienes inmuebles asequibles. Con ello, muchos estadounidenses y residentes binacionales han optado por establecerse completamente en su país de origen, disminuyendo su interés por arrendar en Tijuana.
Esta situación ha derivado en un ajuste del mercado, sobre todo en la solicitud temporal de inmuebles, que se ha traducido en una reestructuración de los precios, tanto de renta como de terrenos. Mencionó que, en cuanto a venta de terrenos y el estancamiento de precios, se deberá a la escasez, y ante menos predios disponibles y una desaceleración del mercado, mantendrá un mismo valor.
“Si antes rentabas un departamento en mil 500 dólares y solo colocaste 5 de 20, ¿qué haces? Pues bajas la renta para poder atraer nuevos inquilinos”, explicó.