Contribuyentes en años anteriores han recurrido al amparo para evitar el pago del impuesto predial, volvieron a interponer recursos legales con el mismo propósito, lo que representa un desafío constante para las finanzas municipales.
El alcalde Ismael Burgueño reconoció que este patrón se repite año con año y el Ayuntamiento no puede impedir que los ciudadanos acudan a instancias legales, sí tiene la responsabilidad de preparar una defensa jurídica sólida para evitar que estos amparos prosperen y afecten la recaudación.
Insistió en la importancia de este impuesto para el mejoramiento urbano y la prestación de servicios públicos. Confía en que, al observar avances tangibles en la ciudad algunos de estos ciudadanos reconsideren su postura y cumplan con sus responsabilidades fiscales.